ISAPRES SE DECLARAN EN CRISIS ANTE EXIGENCIA DE LAS CLÍNICAS PRIVADAS DE QUE LE PAGUEN UNA DEUDA QUE ASCIENDE A 350 MILLONES DE DÓLARES

En crisis se han declarado el conjunto de las Isapres del país a raíz del elevado monto de la deuda de 350 millones de dólares que mantienen con las clínicas, monto que está siendo cobrado por el gremio Clínicas de Chile, el que agrupa a los 46 prestadores de atención de salud privados.

Ante esa situación, las Isapres afirman que podrían entrar en un escenario de inviabilidad financiera que pondría en riesgo a los 3 millones de usuarios que tiene el sistema de seguro privado de salud.

Al respecto, al monto de la deuda que mantienen las Isapres con las clínicas se deben añadir otros 345 millones de dólares correspondiente a le adeuda que mantiene FONASA, con lo cual el monto total que se le debe a las prestadoras de atención de salud privada se empina a alrededor de los 700 millones de dólares.

Desde la Asociación de Isapres informaron que están pasando por una delicada situación financiera que se debería a un histórico incremento en los costos por licencias médicas, prestaciones y judicialización, a lo que se suma el congelamiento de los precios de los planes desde 2020 a la fecha.

El gremio de las clínicas privadas dio a conocer que la deuda que mantiene con ellas Fonasa se viene incrementando desde el año 2020, mientras que en el caso de las Isapres el incumplimiento de pagos se ha agravado en los últimos 6 meses.

Superintendencia de Salud ha frenado alzas de los planes

En cuanto al congelamiento de precios a que hacen alusión las aseguradoras de salud, esto se deben a la entrada en vigencia hace poco más de un año de la ley 21.350, la que regula el procedimiento para modificar el precio base de los planes de salud, siendo la Superintendencia de Salud el organismo que debe definir cuánto es el tope máximo que se pueden subir los precios, lo que antes decidían las mismas Isapres.

Hasta ahora, esa Superintendencia ha emitido fallos de primera instancia que han dejado sin efecto los incrementos de precios de los planes, aduciendo “justificación insuficiente” y argumentando que no porque la Superintendencia deba fijar un techo de precios significa que haya una obligación para las Isapres de subir los planes, y que en caso de hacerlo deben justificarlo debidamente y con argumentos técnicos claros.

Según información del diario El Mercurio de los 31.969 reclamos realizados por afiliados a Isapres rechazando las alzas de sus planes, en el contexto de la nueva ley, la Superintendencia ha acogido favorablemente 26.214 (el 82%).

Por tratarse de fallos de primera instancia, los que dentro de la Superintendencia emite la Intendencia de Fondos y Seguros Previsionales de Salud, las aseguradoras privadas de salud tienen derecho a apelar dentro de un plazo de 10 días, tras lo cual el ente regulador debe emitir un nuevo fallo a través de esa misma Intendencia, el que si nuevamente es rechazado da derecho a que las Isapres presenten un nuevo recurso, dentro de un nuevo plazo de 10 días, debiendo ante esta nueva apelación pronunciarse el Superintendente de Salud en un fallo que tiene el carácter de definitivo.

Paralelamente, informa el mismo diario, en la Corte Suprema se hallan más de 300 mil recursos de protección presentados por las Isapres ante el rechazo del incremento del costo de los planes, por causas anteriores a la entrada en vigencia de la Ley 21.350, cuyos alegatos debieran comenzar en el transcurso de las próximas semanas.

Habrá que estar expectantes a lo que suceda con esta crítica situación en el transcurso de las próximas semanas y meses, para enterarse de lo que en definitiva falle la Superintendencia de Salud ante el alza del costo de los planes de salud y de lo que determine la Corte Suprema ante esos 300 mil recursos de protección que se tramitarán por el rechazo al alza de los planes, entendiendo que en el contexto de la inflación que sigue creciendo, un alza en los planes de salud implicará un nuevo impacto directo y negativo a los presupuestos familiares.